Tantas veces escuchamos las mismas frases hechas que acabamos haciendo de ellas un credo irrefutable. Por ejemplo cuando un comentarista de fútbol comenta la noticia de que el Barça ha ganado a un Racing que ha plantado cara, suele ser habitual que comience su crónica con: "Al final se ha impuesto la lógica". Y claro, a fuerza de escucharlo tantas veces aceptamos como lógico que se imponga la lógica, que para mayor abundamiento siempre viene a ser la lógica del más fuerte. De este modo cada vez que un equipo modesto se enfrenta a uno de los "mal llamados grandes", no solo tiene que enfrentarse a un presupuesto 50 veces superior, y a once jugadores estelares cuya sola mención da miedo, sino que habitualmente tiene que enfrentarse a la LÓGICA que predetermina el resultado antes de que siquiera haya comenzado el calentamiento. Pues bien, frente a esa lógica aplastante nosotros propugnamos la IMAGINACIÓN como método de trabajo, como herramienta para cambiar el mundo y como espacio donde pueda albergarse la esperanza de los humildes que aspiran a romper de vez en cuando toda lógica.
Y que nadie se piense que con esto que decimos nos hemos vuelto locos, que hemos pérdido la cabeza y el rumbo. Muy al contrario, en esta ocasión se está trabajando con sentido común y con mucho esfuerzo en contra de la lógica de un cierre ilógico, y se ha trazado un camino de futuro que nace de la imaginación y que se sustenta en un buen firme y en una línea de acción que dibuja un infinito ilusionante. Porque para que "La Enseñanza" sobreviva a esta herida abierta, necesita alimentarse de la utopía de lo aparentemente irrealizable, y perseguir la búsqueda de lo que está más allá de lo visible. La apuesta es firme, sugerente y arriesgada, como casi siempre que uno se aparta de la fácil lógica que todo lo aplasta.
1 comentario:
La frase me recuerda a otra de Einstein, "la imaginación es más importante que el conocimiento".
A seguir imaginando...
Eso lo saben muy bien los niños...
Y eso, imaginar, es gratis...
Y eso, imaginar, no conoce lógica...
Y eso, imaginar, no conoce números, ni euros, ni planes,...
ni despidos...
Eso, imaginar... es soñar!
Un enorme, enorme abrazo a todos
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